Lo afrocubano en el número 12 de Blogger Cubano



Wait / Orlando Luis Pardo
En mayo de 2013 se cumplió el aniversario 101 de la matanza de los independientes de color1, suceso que condicionó decisivamente el proceso de integración racial al que estaba abocada Cuba tras su independencia de España. Simultáneamente, todavía flota en el aire el último evento de racismo institucional en la Isla, ocurrido en la primavera de este mismo año: la destitución de Roberto Zurbano (cuyo caso abordamos directamente en la sección La Polémica), otrora director del Fondo Editorial de la Casa de las Américas, tras publicar en The New York Times un artículo crítico sobre la realidad de los afrodescendientes cubanos. En este marco, y dada la importancia que para el futuro de Cuba tiene el tema, Blogger Cubano edita este número especial.

A manera de prefacio: Datos sobre la población afrodescendiente en Cuba


Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas

El último censo oficial cubano, dado a conocer en 2002, señaló que la población afrodescendiente en Cuba, sumando personas de la raza negra y mestizos, conformaría el 34% de la población total. Sin embargo, tres elementos ponen fuertemente en duda la veracidad de estos datos:
1.      La intención de los funcionarios cubanos de maquillar por medio de la estadística el evidente desbalance en las estructuras de poder en Cuba, dominadas por una abrumadora mayoría de personas de la raza blanca (o de lo que se considera en la Isla como tal)
2.      La deficiente preparación de los aplicadores de esta clase de censo en Cuba, que incluso aceptan alegremente la percepción racial que tienen los censados sobre sí mismos
3.      Relacionado con este segundo punto: La percepción de una parte de la propia población mestiza, que se percibe blanca como mecanismo de defensa de cara a una sociedad y un sistema prejuiciados

Cuba, orígenes y estructura del racismo / Juan F. Benemelis


Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
Las identidades raciales en Cuba fueron diseñadas en el período de la esclavitud, y tal diseño identitario no ha variado en la psiquis de la población ni en la práctica sociopolítica. Estas identidades raciales tenidas como fijas y universales se relacionan con categorías que han congelado, como naturales y dadas, las diferenciaciones en todos los ámbitos de la sociedad. De ahí que la necesidad de analizar y variar tales identidades construidas durante la esclavitud para legitimar dirección—subordinación grupal—racial implique más que un mero cambio de percepción social. La actual simplificación en Cuba, de negro y blanco, tiene que ver con la no aceptación en los estratos supremos de la sociedad de una representación equitativa del negro.

Integración racial, la asignatura pendiente / Luis Felipe Rojas



Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
 Han pasado ya cien años desde que comenzaran, en 1910, las gestiones legislativas de la entonces joven República para derogar el único partido en la historia de Cuba que agrupó a sus miembros por identidad racial. Se cumplieron cien años, en 2012, de la matanza de aquellos “independientes de color”, como se les conoce mejor entre los pensadores cubanos.
Dos cuestiones trae a debate entre los investigadores cubanos el tema del levantamiento en armas de negros y mulatos, dirigidos por Evaristo Estenoz y Pedro Ivonet, contra la intención oficial de proscribir aquella agrupación partidista. La primera es si en realidad fue una matanza de tales proporciones que pueda hablarse de miles de víctimas. La segunda es si en realidad resultaba necesaria la filiación por interés racial.

Racismo en Cuba: un viejo caso moderno / Manuel Cuesta Morúa


 
Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas

La discusión prosigue. El tema del racismo gana entidad moral e intelectual en Cuba de una manera que revela un asunto más profundo: el fin histórico del modelo de nación que nos diseñó ese portento de intelectual decimonónico que fue José Antonio Saco. Estamos asistiendo así, y en un sentido fundamental, a un cambio de era en Cuba que pone al racismo en medio de la inflexión política a la que nos abocamos.  

El racismo, ese flagelo / Darsi Ferret



  
Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
En Cuba la sociedad es mixta, conformada por similares proporciones de personas de la raza blanca, mestiza y negra. Sin embargo, no existen condiciones de igualdad racial ni tienen similares oportunidades de progreso los distintos grupos poblacionales. O sea, aunque el pueblo cubano sufre de modo general la violación sistemática e institucionalizada de sus libertades fundamentales y derechos básicos, por el uso arbitrario de la fuerza y del mecanismo represivo como método de sojuzgamiento, la Cuba negra y mestiza es obligada por las autoridades del régimen castrista a soportar una mayor cuota de sufrimiento, creciente miseria y exclusión.

La farsa mediática / Armando Añel


Nicolás Guillén
Es secreto para casi nadie que la llamada “revolución cubana” funciona fundamentalmente a nivel mediático, esto es, en función de una estrategia propagandística escenificada en los medios de difusión masiva. Desde su arribo al poder en enero de 1959 —podría decirse que incluso antes—, el castrismo construyó su castillo mediático sustentado no solo en la imagen vanguardista de sus principales representantes (el pelo largo, la barba crecida, el desparpajo del lenguaje, las poses, los amuletos...), sino en su discurso. En ese discurso, la promesa de que la discriminación racial sería barrida del mapa republicano jugaba un papel fundamental.

Negritud y disidencia en Cuba / Ángel Velázquez Callejas


Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
Los acontecimientos relacionados con la disidencia en la Cuba actual parecen estar dados, en lo fundamental, por un radicalismo etno-cultural. En la esfera social, dos tendencias claramente definidas intentan apoderarse de un nuevo resurgir utópico: la intelectual religiosa (que parte de una ideología) y la “reacción cotidiana” que se ejercita sin ningún preámbulo teórico e intelectual.  Aunque a veces ambas tendencias tienden a encontrarse (no a fusionarse) en determinado punto (idea y lugar), la diferencia de espíritu es notable. La primera viene del fuero de la ilustración, de la literatura; la segunda, más contemporánea y moderna, de la voluntad de poder y de una manera de vivir en el mundo. En esta segunda tendencia hallamos una etno-antropología disidente en Cuba.

La protesta musical contra el racismo



El rap cubano ha estado en la vanguardia artística de la denuncia al racismo en Cuba en los últimos veinte años. Surgido en los años noventa, este movimiento musical contestatario ha transitado disímiles vertientes, entre las cuales una constante ha sido la crítica frontal a la discriminación latente en un país donde, paradójicamente, a nivel de composición racial, prevalece lo mestizo.

Por la integración racial y la igualdad de oportunidades



Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas

“Que Estados Unidos haya tenido una ley de derechos civiles conquistada en los años 60 y que, menos de cuarenta años después, ya tenga un presidente negro, es tanto o más que lo que hemos logrado nosotros en Cuba, donde los negros aún no tienen ni poder real ni verdaderas oportunidades”, ha asegurado el cantautor cubano Pablo Milanés (https://ecoscotidianos.wordpress.com/2013/02/25/pablo-milanes-el-socialismo-cubano-se-ha-estancado/). Una realidad, la de la falta de oportunidades y de poder real de los afrodescendientes en Cuba, que se empeñan en transformar diversas organizaciones por la integración racial en la mayor de las Antillas. Entre ellas, por su marcado carácter independiente, cabe destacar estas tres:

El caso Zurbano



Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
 El caso Zurbano estalló a finales de marzo de 2013, cuando el intelectual de ascendencia africana, residente en Cuba, publicó en The New York Times el ya célebre artículo Para los negros en Cuba, la Revolución no ha terminado, que el periódico estadounidense traduciría como Para los negros, la Revolución no ha comenzado. Viniendo como venían de un escritor afín a las instituciones culturales oficiales en la Isla, sus palabras alcanzaron una relevancia mediática considerable, convirtiéndose en un reto para el funcionariado procastrista.

Para los negros en Cuba, la Revolución no ha terminado / Roberto Zurbano


Rostros de Cuba / Luis Felipe Rojas
El cambio es la más reciente noticia sobre Cuba, pero para los afrocubanos es más un deseo que una realidad. En los últimos cinco años han desaparecido muchas prohibiciones absurdas que impedían hospedarse en un hotel, comprar un teléfono celular, vender su casa, abrir una empresa privada, viajar al extranjero, etc. A estos gestos les llaman aperturas, pero no es más que naturalizar la condición ciudadana. Los resultados, no solo económicos, de tales gestos, traerán verdaderos cambios que permitirán a Cuba salir de la Historia y entrar, de una vez, en el Presente. El Futuro se acerca veloz, desesperadamente, y en esa carrera van cayendo sueños y utopías compartidas hasta ayer por muchos cubanos.

Entre el garrote y el agradecimiento / Juan Antonio Madrazo


Felicidad / Orlando Luis Pardo
El linchamiento y la satanización de quienes intentamos construir la nación desde una voz diferente, ha sido una práctica habitual durante los últimos 52 años en Cuba. Ambas herramientas, como tecnología de poder, le han ido muy bien al régimen cubano, y el tema racial como zona discursiva no ha estado ajeno.
Para nada a Roberto Zurbano le sirvió su credencial de buen revolucionario, de la noche a la mañana la crisis de confianza lo marcaría para siempre. Era destituido como presidente del Fondo Editorial de Casa de las América en contra de su voluntad, pues ingresaba a la categoría de no confiable y ni siquiera su jefe inmediato, el disciplinado sargento Roberto Fernández Retamar, se atrevería a meter el cuerpo por él, pues fue uno de los primeros en cobrarle  la altura de su atrevimiento pidiendo su renuncia.

En el camino equivocado / Leonardo Calvo Cárdenas


Descanso / Orlando Luis Pardo
Cuba vive un complejo y traumático proceso de crisis y transformaciones en el cual se hacen cada vez más evidentes las carencias y fracturas que complican el escenario socioeconómico. En ese marco las desventajas y desigualdades que enfrentan los afrodescendientes cubanos se recrudecen de manera inquietante, en tanto al peso de una carga histórica muy mal aliviada se unen una serie de diseños y medidas destinadas a enfrentar la debacle económica, pero que tienden a profundizar esa indeseable y cada vez más evidente polarización social. Ella afecta sobremanera a un sector social que, a pesar de su peso demográfico y sociocultural, ha llevado siempre la peor parte en la interrelación de convivencia, sin importar época o momento histórico.

José Martí: Del triunfo bélico a la problemática racista / Miguel Cabrera Peña


Más de una vez José Martí pronosticó que el simple acceso a la república no resolvería los problemas sociales, y habló de la permanencia del hambre y la miseria y la preterición de los pobres. Desde luego que él no quiere repetir en su país la historia latinoamericana donde la oligarquía solo vio el modo de despojar a los españoles del poder para sentarse sobre el lomo de las naciones recién nacidas. Pero en el campo multirracial rebelde abundan también representantes discriminadores de una oligarquía venida a menos por la guerra y otras capas más o menos próximas que, junto al poder, o ellas mismas en el poder que entrevé Martí, mantendrán posturas similares a quienes se opusieron al independentismo. Todo esto lo lleva a echar una de sus ojeadas menos optimistas a los acontecimientos mediatos:
“Metal conservador entrará por mucho en el cuño de la futura moneda revolucionaria. Triunfarán los conservadores, cuando la revolución triunfe. Distinta será la forma, y se concederá un ápice más al pueblo hambriento; pero la esencia no cambiará, ni cesarán la ira y el hambre”.

Un homenaje a Ángel Escobar / Armando Añel




Angel Escobar
 Este año 2013 marca el décimo sexto aniversario de la muerte del poeta afrocubano Ángel Escobar, uno de los escritores más importantes del siglo XX en Cuba y, a mi modo de ver, uno de los pocos relevantes formados a la sombra del socialismo real. Escobar nació en Guantánamo el 3 de marzo de 1957 y se suicidó en La Habana en febrero de 1997, lanzándose al vacío.